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Alejandra Wood, Cesco: “Chile se encuentra frente a una encrucijada respecto de su minería”

  • A juicio de la directora ejecutiva de este centro de pensamiento, es urgente analizar cómo aprovechar el parque industrial minero de clase mundial que hemos levantado en Chile, el capital humano desarrollado y la escala de la industria para proyectarla en las próximas décadas.

Alejandra Wood, directora ejecutiva de Cesco.

Para los que forman parte de la industria minera, el Centro de Estudios del Cobre y la Minería (CESCO) es sin duda una institución emblemática, que ha sido parte del quehacer, pensar y repensar minero a lo largo de las últimas décadas. Debe ser, porque esta organización sin fines de lucro con casi 40 años de historia nace en 1984, con el fiel propósito de promover políticas públicas para la industria en los países donde la minería es un sector estratégico para su desarrollo. Para llevar esto a cabo, proporciona información y análisis permanente, y apoya y promueve diferentes actividades para favorecer el diálogo entre miembros de la sociedad civil y el sector minero. Sus eventos públicos más relevantes y que probablemente ya son parte del inconsciente colectivo minero son Cesco Week Santiago y Cesco Week Shanghai, los que constituyen su principal vía de financiamiento.

“En sus más de tres décadas de vida, CESCO ha sido uno de los centros de pensamiento más influyentes en torno a los dilemas mineros en América Latina. Entre sus aportes más relevantes de los últimos años están: i) la generación y promulgación de la “Ley de personas competentes” y el “Código de informes de minería prospectos, recursos y reservas mineras” asociadas a dicha ley en Chile; ii) la discusión y promulgación de la “Ley para el cierre de operaciones mineras” de Chile; iii) la reforma del gobierno corporativo de Codelco; iv) el grupo de discusión sobre “Minería Virtuosa, Sostenible e Inclusiva”, liderada por el ex presidente Ricardo Lagos y que dio vida a los programas público-privados “Alianza Valor Minero” y “Alta Ley”; vi) el insumo para el capítulo de exploraciones del estudio sobre «Productividad en la minería en Chile» de la Comisión Nacional de Productividad; vii) la “Comisión Nacional del Litio”; y viii) el desarrollo de la «Política Nacional Minera 2050» del Ministerio de Minería”, explica Alejandra Wood, directora ejecutiva de CESCO.

La institución cuenta hoy con más de 50 miembros con amplia experiencia en organismos públicos, privados, empresas y academia, proporcionando a la corporación experiencia en diferentes materias de la industria minera. Algunos de ellos han participado y liderado propuestas, estudios y consultorías para empresas mineras y gobiernos de América Latina en temas regulatorios y de políticas públicas como el nuevo Código Minero de Ecuador, las mejoras institucionales en Colombia o la discusión sobre los cambios normativos mineros en Uruguay.

LA VISIÓN DE ALEJANDRA WOOD

Para saber más sobre el recorrido de esta emblemática organización, sus desafíos actuales y propósitos para el futuro, conversamos más profundamente con Alejandra Wood, quien nos entrega un detallado y entretenido análisis.

-¿En qué consiste el trabajo que realizan hoy? ¿En qué áreas están enfocados? ¿Quiénes conforman el equipo?

El trabajo de CESCO ha sido variado en el último tiempo. A los eventos anuales de Cesco Week Santiago y Asia Copper Week, se suman distintas comisiones de trabajo lideradas por miembros de la institución, que se han enfocado en los temas de futuro de la industria como tecnología, innovación y sustentabilidad, así como en propuestas de políticas públicas en materia de fundiciones y, próximamente, propuestas para el ámbito de la minería para el proceso constituyente.

Asimismo, participamos de forma activa en el desarrollo de la “Política Nacional Minera 2050”, en donde algunos de nuestros miembros fueron responsables de la coordinación de las mesas de “Institucionalidad y Desarrollo Minero” (liderada por José Joaquín Jara, integrante del directorio), y de “Cadena de valor e innovación” (liderada por el director Osvaldo Urzúa, también integrante del directorio).

Por otra parte, hemos impulsado la discusión en torno al futuro de las fundiciones en Chile, a través de una propuesta de política pública que ha despertado interés entre actores públicos y privados.

Además, desarrollamos un estudio sobre la transformación tecnológica de la minería del cobre en la región andina y su impacto en la licencia social para operar, tema que ha tomado especial relevancia en estos momentos debido a la pandemia, y la necesidad de la industria por seguir operando. En las próximas semanas, comenzaremos una segunda etapa de este trabajo que con el apoyo de GIZ, permitirá indagar en algunos de los principales hallazgos de la primera etapa como son: agua e infraestructura compartida para el sur de Perú y norte de Chile; emisiones de carbono y compensaciones, servicios basados en la naturaleza, electromovilidad en faenas y minería y economía circular, siempre con el foco puesto en la minería de la región Andina.

Recientemente, hemos conformado la comisión “Chile: La ruta hacia la minería más sustentable del mundo”, con el fin de realizar un diagnóstico inicial de las industrias del cobre y litio en sus componentes de sustentabilidad social, ambiental y económica, además de plantear una posición competitiva futura en la materia y presentar un mapeo de las brechas y riesgos que existen para alcanzar una industria más verde.

Sumado a esto, hace algunos meses establecimos una comisión de trabajo sobre Minería Circular, junto a SOFOFA Hub, y que cuenta con la participación de importantes empresas del sector minero con el foco inicial puesto en la reutilización de escorias de fundiciones y neumáticos.

También, cabe mencionar la coordinación de una comisión de Minería Verde bajo el alero de la Comisión de Desafíos de Futuro, Ciencia, Tecnología e Innovación del Senado de la República, con el objeto de proponer las iniciativas necesarias para que Chile sea un líder mundial en minería verde en las próximas décadas.

CAMBIOS POR PANDEMIA

– ¿Cómo ha sido la experiencia de trabajo en los últimos 5 años? ¿Qué cambios ha provocado la pandemia en su quehacer?

El trabajo de los últimos años ha estado enfocado en renovar el quehacer de Cesco, convocando a nuevos miembros y posicionándonos como un espacio de encuentro, diálogo y colaboración del sector minero, el sector público y la academia y sus dos principales eventos –Cesco Week Santiago y Asia Copper Week- históricamente, han sido parte importante de la agenda.

Desde el advenimiento del Covid 19, hemos reforzado nuestra presencia a través de un conjunto de eventos online en colaboración con terceros, para compensar la imposibilidad de reuniones físicas. Todo esto, sin que el trasfondo de la labor del centro cambie, ya que seguimos impulsando el trabajo de comisiones para levantar diagnósticos y propuestas de política pública y colaboración público-privada en materia minera.

– ¿Cuáles son las áreas claves que consideran que se deben abordar hoy para avanzar hacia una minería sustentable, que es una de las exigencias que se están haciendo a nivel mundial?

Es clave mirar las dimensiones económicas, ambientales y sociales de la sustentabilidad. En materia económica y social, junto con incorporar un mayor contenido local, es fundamental el trabajo con los proveedores y el ecosistema y junto a ello, es relevante poner en marcha procesos de producción limpia, eficiente y que agreguen valor. En el ámbito ambiental, sin duda, el transitar hacia una minería baja en emisiones, con un eficiente manejo del recurso hídrico y el bombeo de agua de mar, la adaptación al cambio climático, una minería que minimice y gestione sus residuos y atienda sus impactos en la biodiversidad utilizando, por ejemplo, soluciones basadas en la naturaleza y que ponga a la tecnología al centro de todos estos grandes desafíos.

Junto a ello, será imperativo cuantificar todas estas variables de gestión bajo nomenclaturas similares, que permitan transparentarlas, tanto para la información de los principales stakeholders como también para acreditar la producción responsable de los minerales, lo que será requisito de los mercados.

PRINCIPALES DESAFÍOS

-Bajo la contingencia actual, ¿cómo ven el desarrollo de la minería nacional? ¿Cuáles consideran que son los principales desafíos para Chile y cómo se deberían abordar?

El sector minero en Chile ha sido uno de los más resilientes al momento de enfrentar la pandemia, en gran medida porque se trata de una industria que trabaja con altos estándares de seguridad, por lo que adoptar las medidas necesarias para enfrentar el virus fue algo más sencillo en relación con otros sectores económicos. A esto, se suma que se hizo un trabajo en conjunto con los trabajadores, quienes hicieron importantes esfuerzos para mantener la producción bajo estos estándares y mantener los contagios al mínimo.

La pandemia, además, ayudó a acelerar la incorporación de nuevas tecnologías que tal vez hubiesen demorado años en ser incorporadas. El teletrabajo ya es una realidad en la minería, y se está volviendo un pilar estratégico dentro de algunas faenas. A esto, se suma la aceleración del uso de tecnologías de automatización y remotización, especialmente el uso de salas CIO para operar, las que han reducido la cantidad de personal presente en faena.

Levantando la mirada más allá de la crisis sanitaria, sin duda Chile se encuentra frente a una encrucijada respecto de su minería. Si la política minera de los últimos treinta años fue exitosa en términos de atracción de inversiones, aumento del del volumen de producción (se cuadruplicó) y un importantísimo aporte al crecimiento y desarrollo del país, es urgente pensar en conjunto, cómo aprovechamos este parque industrial de clase mundial, el capital humano y escala de la industria para proyectarla en las próximas décadas. Sobre todo, si tenemos la oportunidad que presenta el protagonismo del cobre en la transición energética y tecnológica que vive el planeta.

Sin duda, la contingencia política plantea la oportunidad de tener esta conversación de manera de no dejar pasar la oportunidad de posicionar a Chile como proveedor favorito y sustentable de una materia prima crítica para el futuro del planeta, asegurando además que la actividad gatille el desarrollo de otros nichos productivos que provean de nuevos empleos de buena calidad y el desarrollo de una plataforma de servicios y tecnologías para que junto con exportar cobre y litio, también exportemos servicios para la minería global. (Fuente Corporación Alta Ley. Editada para www.guiaminera.cl)

 

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