DestacadosNotas MinerasNoticias
Trending

Cuatro sectores continúan paralizados en El Teniente

  • La industria cuprífera chilena enfrenta su mayor prueba mientras avanza el Plan de Reinicio Seguro y las miradas se concentran en esta División de Codelco.

En las profundidades de la Cordillera de los Andes, el eco de la paralización resuena aún en cuatro sectores clave de la mina El Teniente, el mayor yacimiento subterráneo de cobre del mundo. Recursos Norte, Andesita, Andes Norte y Diamante permanecen en pausa, reflejando la magnitud de la crisis que remece a la industria minera nacional y mantiene expectante tanto a las comunidades como a los mercados globales del cobre.

El accidente ocurrido semanas atrás -uno de los más impactantes en la historia reciente de Codelco- forzó a la empresa estatal a renovar sus protocolos y a implementar un plan de contención y acompañamiento sin precedentes. Hasta la fecha, 13.260 trabajadores, tanto propios como de empresas colaboradoras, han participado en jornadas de reflexión, talleres y conversatorios destinados a procesar el impacto de lo ocurrido. Destaca la atención individual brindada a 924 personas a través del CECOP y otras instancias de apoyo psicosocial, así como la capacitación en primeros auxilios psicológicos para supervisores, dando cuenta del compromiso de la compañía con la salud mental de sus equipos.

La magnitud de la paralización no solo afecta la producción: durante esta semana, Codelco reportó el envío de 59,1 mil toneladas de mineral a la Planta Colón y 8,3 mil toneladas a Sewell, mientras la fundición se prepara para reiniciar operaciones. Sin embargo, la reactivación total de los sectores aún detenidos es vista con cautela. El Plan de Reinicio Seguro y Progresivo avanza en zonas como Panel Esmeralda, Esmeralda, Panel Reno, Pilar Norte, Diablo Regimiento y Pacífico Superior, donde la actividad regresa lentamente bajo estrictos controles.

En el plano institucional, Codelco reforzó su transparencia al nombrar a Mark Cutifani —ingeniero de reconocimiento internacional— para liderar la evaluación independiente de expertos sobre el accidente. Paralelamente, se mantiene activa la Comisión Interna Investigadora y se registran 28 requerimientos de diversas autoridades fiscalizadoras, incluyendo el Ministerio Público, la PDI y Sernageomin, que han intensificado las diligencias en terreno.

La resonancia de esta crisis llegó al Congreso Nacional, donde las comisiones de Minería y Energía del Senado y la Cámara de Diputados recibieron a la plana mayor de Codelco y representantes sindicales. En cada instancia, la compañía reiteró su compromiso con la seguridad, la transparencia y el acompañamiento permanente a las familias afectadas.

Lo ocurrido en El Teniente ha reavivado el debate sobre los estándares de seguridad en la minería chilena, una industria que aporta cerca del 10% del PIB nacional y posiciona a Chile como el mayor productor mundial de cobre. De acuerdo con datos de la Comisión Chilena del Cobre (Cochilco), cada día de detención en El Teniente supone una merma significativa para las arcas fiscales.

Mientras los ojos del país y del mundo siguen puestos en la cordillera, la paralización de cuatro sectores actúa como un recordatorio de que, más allá de los números, la verdadera riqueza de la minería radica en la vida y el bienestar de quienes, día a día, descienden a las entrañas de la tierra para hacer posible el motor económico de Chile.

El pulso de la mina aún late, pero su ritmo depende hoy, más que nunca, de la seguridad y la confianza en el regreso.

 

Artículos relacionados

Close