DestacadosEntrevistasNoticias
Trending

“La mediana minería está golpeada por ordenamiento jurídico y normativo que se ha dado en el país”

  • Cristián Argandoña, vicepresidente de SONAMI, dijo que “la normativa que existe hoy día tiene en jaque y en serios aprietos a muchas de las operaciones mineras de este segmento”.

Cristián Argandoña León, gerente general del Grupo MInero Las Cenizas y vicepresidente de SONAMI

En la comuna de Cabildo, Región de Valparaíso, se encuentra una empresa de la mediana minería llamada Grupo Minero Las Cenizas, que comenzó a operar en 1978 con la extracción y procesamiento de cobre. Hoy, tras 44 años de trabajo y después de expandirse a Taltal, Región de Antofagasta, Cristián Argandoña León, gerente general del grupo desde 2014 es, quien hace unos meses se inició en el mundo gremial al ser electo vicepresidente de la Sociedad Nacional de Minería (SONAMI).

Ingeniero comercial de profesión, desde 1988 está ligado al mundo minero en compañías de mediana minería, donde empezó a trabajar a los 27 años como Superintendente de Administración en una faena.

Después de 34 años y con una vasta experiencia en el rubro, su gran preocupación y foco en su incursión en el gremio es la mediana minería, en la cual -asegura- “la normativa que existe hoy día pone en jaque y en serios aprietos a muchas de las operaciones mineras de este segmento”.

INCURSIÓN EN LA ACTIVIDAD GREMIAL

Cristián Argandoña comparte responsabilidades en la entidad gremial junto a la mesa directiva del presidente Jorge Riesco y del otro vicepresidente, Patricio Céspedes.

-Entiendo que este es su primer cargo gremial. ¿Qué espera usted como vicepresidente de SONAMI?

Es mi primera actividad titular en un gremio. El desempeño de SONAMI lo conozco hace muchos años, por la amplia trayectoria en SONAMI de personeros de Cenizas, como don Alfredo Ovalle, que fue presidente y vicepresidente de la Sociedad Nacional de Minería en varios períodos y presidente del directorio de Cenizas. Por esto, conocemos perfectamente el vínculo de las distintas empresas con el gremio y el rol que tiene que jugar para preservar la actividad minera, y estar atento a todos los temas que la industria minera requiere, demanda y exige en la emisión de políticas públicas. Especialmente, dar a conocer un poco el parecer de la industria en general, pero muy particularmente, de cada uno de los segmentos que la componen, que creo que es un tema muy relevante para poder entender un poco la industria.

– ¿Qué lo motivó a participar en el tema gremial?

Fundamentalmente desde el mundo de la mediana minería, que creo que es un segmento que está particularmente afectado y golpeado por el ordenamiento jurídico y normativo que se ha dado en el país, ya desde hace unos 10 a 15 años, y donde vemos con mucha preocupación que las empresas del segmento de la mediana minería están con vulnerabilidades bien importantes, que no tienen que ver con las económicas; no tienen que ver porque sea más o menos rentable operar, sino que el ordenamiento jurídico existente, y en particular el tema medioambiental, que ha complicado de sobremanera la subsistencia y permanencia de estas empresas en el sistema. Esa es la principal motivación por la cual me interesa participar y poner de manifiesto ante las autoridades y ante el público, en general, que la mediana minería es un segmento muy relevante. Es un segmento que es responsable de 2.500 millones de dólares de exportaciones anuales. Somos responsables de más del 5% la producción de cobre del país, somos un segmento que le da empleos de calidad y formales a más de 30 mil personas. Es bastante más grande que el sector vitivinícola, es prácticamente un 80 u 85% del sector de la celulosa. Entonces, me parece súper relevante que el país y la autoridad conozcan cuál es el tamaño de este segmento, porque la normativa que existe hoy tiene en jaque y en serios aprietos a muchas de las operaciones mineras que lo conforman.

Hace una década, las empresas de la mediana minería eran prácticamente 26 a 27 y hoy día, operando con todo lo que se conoce, no hay más de 8 o 9, entonces eso, de alguna manera, está indicando que aquí hay un tema que hay que resolver. La normativa que existe no distingue este tamaño de empresas y nos comparan indistintamente con las grandes, cuando somos entre 50 y 60 veces más pequeñas que las operaciones de mayor tamaño.

Este es un tema que debe ser entendido en toda su magnitud con el objeto de que las normas que se diseñen recojan correctamente las vidas útiles de estos proyectos. Para una empresa de la mediana minería, tener un proyecto de 5 años es absolutamente normal, pero para la normativa ambiental eso no existe. Es importante entender que estas empresas desarrollan la geología del yacimiento conforme avanza su explotación. Así las cosas, un proyecto de mediana envergadura, debe ingresar tantas veces como extensiones pueda experimentar su vida útil y así mantenerse en regla y con sus permisos actualizados.

A mi juicio, en esta práctica hay un error de diseño, en el sentido de que como los criterios van cambiando y se van actualizando, y se van incorporando nuevas maneras de ver este tema, estas empresas estamos corriendo el riesgo de quedar fuera de carrera por definición.

POTENCIAL DE CRECIMIENTO DE LA MEDIANA MINERÍA

Cristián Argandoña profundiza en el tema que tan bien conoce. “Este es un aspecto que la autoridad debe recoger a la brevedad. A mi juicio, el único espacio donde existe potencial de crecimiento de la producción de cobre en el país es en el segmento de las medianas mineras y Chile hace rato se olvidó de generar las condiciones para impulsar el crecimiento, se olvidó de ver que para poder recaudar más, generar más empleo, propiciar los encadenamientos productivos y generar más riqueza hay que producir más, y para ello hay que fomentar que este tipo de empresas tenga la posibilidad expandir sus proyectos mineros e incrementar sus producciones y volúmenes de tratamiento.

– ¿Por qué la nueva mesa ha puesto en su foco el rol de la mediana minería?

Como lo dijimos en nuestro programa, la mediana minería se encuentra inserta en las diferentes localidades a lo largo del país y creemos que su modelo de negocios puede generar efectos transformadores significativos en estas zonas, para lo cual se requieren condiciones y políticas públicas que incentiven su desarrollo.

Esto, no quiere decir que el resto de la industria no nos interese, ya que obviamente hay temas también relevantes con los otros segmentos, tales como: lo que pasa con los pequeños mineros y el tema de patentes, la relación con ENAMI y, obviamente, con la gran minería y toda la discusión del royalty que se ha tomado la agenda en los últimos meses.

CARACTERIZANDO EL SECTOR DE LA MEDIANA MINERÍA

En la entrevista, el vicepresidente de Sonami revela que la entidad gremial busca conocer a fondo las características de este sector de la industria minera extractiva.

– ¿Cuáles son las perspectivas de este segmento productivo?

Interesante la pregunta, porque SONAMI ha encargado un estudio para poder caracterizar al sector, que tiene como finalidad poder entender un poco cómo está conformado y, en función de eso, colocar este insumo y este producto a disposición de la autoridad, para que pueda entender y generar mejores políticas públicas en el futuro.

A partir de este estudio, se nos revelan unos datos bien interesantes, tales como que la producción de la mediana minería hoy día está prácticamente en más de 300 mil toneladas de cobre fino por año. Este dato no era muy conocido. A cualquier miembro del segmento tú le preguntabas cuál era la producción y te decían por ahí por las 260 mil. Este segmento ha ido incrementando sus volúmenes de producción muy de a poco y hoy ya está sobre las 300 mil toneladas de cobre fino, lo cual es muy importante, y creo que con las condiciones e incentivos adecuados se abre un espacio para poder incrementar esto de forma significativa hacia el futuro.

– ¿Cuáles son esos incentivos y qué se necesita para un mayor desarrollo tanto del punto de vista normativo como de financiamiento?

Hay dos tipos de factores, unos inherentes a las empresas. Creo que las empresas de la mediana minería tienen que hacer esfuerzos por, primero, generar proyectos de mayor envergadura en términos de vida útil. No es fácil y no solo es cuestión de querer hacerlo, para eso hay que invertir en exploración, hay que tener éxito en esa tarea a objeto de poder diseñar y modular proyectos que nos lleven a vidas útiles de entre 8 y 10 años y no como hoy, que estamos con proyectos relativamente cortos de 4 a 6 años.

Esto es bien relevante, porque cuando tú tramitas un permiso y tienes un proyecto de 4 años, tus permisos son para 4 años. Sin embargo, por ejemplo, Minera Las Cenizas en Cabildo tiene 44 años de existencia, ni por lejos cuando entramos a Cabildo pensamos que íbamos a estar 44 años, entonces teníamos un proyecto de 5 años, después le fuimos agregando más reservas y los plazos se empezaron a extender entre 2 y 4 años más y así sucesivamente. El problema de eso es que, para el mismo yacimiento, la misma planta, los mismos trabajadores, la misma mina, el mismo proceso y la misma cantidad de producción, debemos entrar al sistema más de 6 o 7 veces para actualizar el proyecto, eso no es justo y es una discriminación en contra de este tipo de empresas.

Nosotros no agregamos más tonelaje y no hay mayor impacto del que ya existe, entonces no tiene sentido que por cada extensión que se pueda dar, la empresa tenga que volver a entrar al sistema y someter a evaluación completa el yacimiento.

APORTANDO VALOR A LAS EMPRESAS MINERAS

Cristián Argandoña dice que “otro esfuerzo que deben realizar las Compañías es el de adoptar metodologías o estándares en la forma de administrar y accionar los proyectos; activar metodologías o estándares que permitan hacer trazable la información que generamos, desde adoptar alguna norma para poder calificar tus recursos y reservas minerales (norma JORC o 43/101), que te permite objetivar el tamaño de tu empresa en términos de los recursos mineros que, al final del día, a mi juicio, es lo único que le da valor a las empresas mineras”.

“En cuanto a los factores externos, respecto del tema normativo, como lo he dicho anteriormente, la autoridad y los responsables de legislar, deben ser capaces de distinguir expresa y claramente este segmento y, de alguna manera, facilitar y darle mayor flexibilidad a las tramitaciones que hacen las empresas. Ahí sería bueno que se aplicara algo similar a la ley del mono habitacional, en el ámbito medio ambiental; “ley del mono ambiental” que permita agilizar las tramitaciones y corrección de desvíos por parte de las empresas. Nadie está pidiendo hacer vista gorda con el tema medioambiental, para nada, pero este país necesita revisar el balance entre crecimiento y protección al medioambiente”, releva el dirigente gremial.

PROTECCIÓN MEDIOAMBIENTAL Y SOSTENIBILIDAD

“Hoy, el tema de la protección medioambiental está por sobre cualquier cosa y eso, en el mediano y largo plazo, no es sostenible. A fuerza de paralizar trabajos y paralizar inversión, nos vamos a meter en otro tipo de problemas, como pérdida de competitividad, desempleo, entre otros efectos negativos”, advierte Argandoña

“Las medianas mineras trabajan muy ligadas y vinculadas a las distintas regiones en las cuales se insertan. Ahí, la responsabilidad de nuestras empresas es prácticamente mayoritaria en el PIB local de esas zonas donde estamos. Es bien relevante e importante que eso se tenga en cuenta y se tome en consideración a la hora de generar la política pública. Un ejemplo: no es posible que la autoridad esté orgullosa porque autorizó el diseño y la fabricación o la construcción de una bodega de sustancias peligrosas, o una bodega de cal, o la extensión de 2 kilómetros de un tubo que lleva un poco de agua. Eso no agrega ni un valor al sistema, no hay mayor producción, no hay mayores empleos. Hay que poner el foco en aquellos proyectos que mueven la aguja, que generan valor, mayor actividad económica y mayor integración para el país”, dice el vicepresidente de SONAMI.

“En relación con el tema del financiamiento y el posible acceso de nuestras empresas a ellos, para desarrollar los proyectos, es necesario que las compañías hagan trazable su información, sistemas de gestión, relacionamiento comunitario y en general todo lo relacionado a nuestras operaciones, con el objeto de darle certeza o mayor seguridad a los potenciales inversionistas o financistas de proyectos en particular. Eso, por el lado de lo que es externo, para que nos entiendan mejor, en términos de los modelos de desarrollo de las empresas medianas”, explica.

Actualmente, está en boga y en discusión todo el tema tributario para poder financiar las demandas y las políticas públicas.

Sobre esto señala: “Bueno, para poder atender las demandas sociales existentes es fundamental hablar de crecimiento, si no hablamos de crecimiento vamos a quedarnos pegados y difícilmente se pueda sufragar y se pueda atender el costo de estas iniciativas sociales que se requieren para poder atender las demandas existentes. Me parece que ahí hay que hacer un foco importante y, por lo tanto, aparte del financiamiento, hay que generar también, correctas y adecuadas normas medioambientales y normativas en general para el desarrollo de esta industria”.

ÉNFASIS EN LAS INVERSIONES EN MINERÍA

– ¿Es ahí donde el Gobierno debe poner el énfasis para atraer inversiones en este segmento productivo?     

Hay muchos temas, pero el fundamental es ese. Por ejemplo, el Gobierno pretende recaudar medio punto del PIB, aproximadamente, con la instalación del royalty, eso es del orden de los 1.500 millones de dólares. Con esto quiero señalar que, con un incremento de un millón de toneladas de producción de cobre, el país podría recaudar casi 1.300 millones de dólares más, solamente por la aplicación del impuesto a la renta. No estoy hablando de royalty. Entonces, necesariamente hay que tener esta discusión. ¿Cómo hacemos para que el sector en su conjunto, pequeño, mediano y grande, podamos mover la barrera de la producción de cobre anual?  Hace 18 años que Chile no crece en producción de cobre y en el año 2022 vamos a experimentar una caída muy importante.

La producción de 2022 va a bajar entre un 6 y 7% en comparación a 2021, y eso nos tiene que llamar la atención. Eso son casi 500 mil toneladas menos de producción que, en términos de recaudación, estamos hablando de 600 a 700 millones de dólares que nadie lo plantea. Entonces, es relevante tener esta discusión y colocar los acentos y los énfasis en poder también generar las condiciones para crecer. Eso está demostrado, la minería genera empleos de calidad, genera encadenamientos productivos con los proveedores, entre otros, que van generando otro movimiento que no está ni siquiera evaluado. Se habla de que la minería es responsable del 12 o 13% del PIB nacional, pero si tomamos el PIB inducido, o sea todo lo que genera en remuneraciones, contratación de servicios, estamos hablando de más del 20%.

ROYALTY MINERO Y REFORMA TRIBUTARIA

– ¿Cuál es su opinión sobre la reforma tributaria y, en particular, el royalty a la minería?

El royalty, desde que partió hasta lo que existe hoy en la mesa, ha experimentado una evolución positiva, pero persisten algunos temas que creo que es necesario destacar. Uno es el tema ad -Valorem. Cualquier impuesto ad-Valorem, o sea, una recarga al ingreso sin tener en cuenta la condición de costos de eficiencia que pueda tener una empresa, es destructivo. En este minuto, eso lo han reducido al 1%, pero bueno, es un 1% de distorsión total respecto a la industria, que no se hace cargo de las empresas que tienen mayores costos. También, se ha dicho que no va a aplicar cuando la empresa tenga margen negativo; eso puede ser una fórmula con la cual uno salva, pero por definición conceptual un impuesto ad-Valorem no es bien visto, porque no dice relación con la eficiencia de las empresas.

Después, está el tema de la carga tributaria a nivel global. Los cálculos que han circulado varían mucho entre lo que plantea el Gobierno versus los que plantean los distintos representantes de la industria, incluso, algunos profesores y algunas universidades donde estos porcentajes están fluctuando entre el 40,5 y el 50%. Eso es lo que es necesario revisar in-extenso, son los supuestos sobre los cuales se han construido estas propuestas, supuestos tales como, cuál es el nivel de crecimiento que estamos proyectando para la industria y cuál es el nivel de costo que estamos proyectando para la industria. Es necesario que todos los actores nos pongamos de acuerdo en esos supuestos y consensuemos una visión de futuro para la industria.

El riesgo de quedar con una carga tributaria excesiva nos puede hacer perder flujos de capital importantes para el desarrollo de la minería en el futuro. Convengamos que Chile tiene buena parte de las reservas de cobre del mundo y, por lo tanto, es muy necesario e importante que la carga tributaria esté bien balanceada y que no quedemos fuera de competencia con los países con los que queremos compararnos, entiéndase Australia, Canadá y el mismo Perú, que tienen cargas tributarias en torno al 42-41%. Entonces ¿por qué Chile va a quedar con una carga mayor? … no tiene lógica.

Entonces hay que revisarlo, pero también hay que incorporar el crecimiento, porque si tú no lo incorporas estás tratando de obtener todos los recursos a través de la aplicación de un solo mecanismo, y eso no alinea bien los intereses de nadie, ni de los que quieren mayores recursos, ni en los que buscamos incrementar los volúmenes de producción. Al final del día, si no se tiene esta conversación, el planteamiento del Gobierno puede ir en contra del mismo recaudador, donde el royalty que propone no recaude lo necesario.

– ¿Cree usted que esta reforma pone en riesgo la competitividad de la industria?

La pone en riesgo si es que no se atienden las legítimas críticas en el tema. Si el Gobierno propone una reforma o una propuesta del royalty con una carga tributaria que quede en el 47-48%, evidentemente vamos a perder competitividad. Recordemos que los mismos actores que producen en Perú, Canadá o Australia están aquí, entonces proyectos que tienen menor carga probablemente se hagan más atractivos desarrollarlos en Perú o en otro lado. Entonces, eso es lo que hay que tener en consideración, uno no puede quedar al margen a lo que está pasando en el entorno de los países con los que queremos compararnos. (Entrevista de Boletín Minero. Editada paravwww.guiaminera.cl)

Artículos relacionados

Close