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Radiografía de la Innovación: Revelaciones y Desafíos de los Proveedores Mineros en Chile
- Resultados y conclusiones de la 9ª Encuesta de Innovación en Empresas Proveedoras de la Minería, realizada por Cochilco.
La minería chilena es reconocida mundialmente por su aporte económico y tecnológico, pero ¿qué sucede con sus proveedores? La novena versión de la Encuesta de Innovación en Empresas Proveedoras de la Minería, desarrollada por Cochilco, pone bajo la lupa a este sector estratégico, revelando su rostro más actual, los desafíos que enfrenta y las oportunidades que asoman en el horizonte.
UNA RADIOGRAFÍA INÉDITA: AMPLITUD Y REPRESENTATIVIDAD
Esta edición de la encuesta marcó un hito al abarcar a 806 empresas proveedoras, el mayor alcance desde que existe este estudio. Esta robusta muestra permite dimensionar con inédito nivel de detalle la estructura, capacidades y prácticas de quienes sostienen la cadena productiva minera en el país. La alta participación –fue respondida entre septiembre y octubre de 2025 por vía digital, dirigida a más de 3.600 empresas– evidencia el interés por comprender y fortalecer la innovación en el sector.
UN SECTOR VITAL, PERO DE MENOR ESCALA Y FUERTE IMPRONTA NACIONAL
El universo de proveedores está compuesto mayoritariamente por empresas de menor tamaño, de capital nacional y con una clara orientación hacia los servicios operacionales. Estas compañías resultan esenciales para la minería, aunque presentan importantes brechas en sofisticación tecnológica, diversificación de oferta y capacidades de internacionalización.
INNOVACIÓN: SÍ, PERO CON BAJO GRADO DE FORMALIZACIÓN
Uno de los hallazgos más llamativos es la innovación activa pero poco estructurada: la mayoría de las empresas declara haber innovado en los últimos dos años, pero lo hace de manera informal, sin áreas especializadas, procesos definidos ni presupuestos dedicados. La innovación existe; sin embargo, no está institucionalizada y depende, en gran parte, del impulso individual o la necesidad puntual.

EL AUTOFINANCIAMIENTO SIGUE SIENDO LA NORMA
El estudio revela que el autofinanciamiento es el principal motor de la innovación. El uso de fondos públicos o privados y de incentivos tributarios para I+D permanece bajo, lo que limita la envergadura y continuidad de los proyectos.
Asimismo, solo el 23% de las empresas ha accedido a algún instrumento público de apoyo, concentrándose en los programas de CORFO, lo que deja en evidencia brechas de información, capacidades y pertinencia sectorial de los instrumentos disponibles.
PROPIEDAD INTELECTUAL Y DIGITALIZACIÓN: DESAFÍOS PENDIENTES
El uso de instrumentos avanzados de propiedad intelectual es aún limitado: la mayoría se concentra en el registro de marcas, mientras que las patentes, licenciamiento, vigilancia tecnológica o transferencia de tecnología muestran niveles muy bajos de adopción. Esto restringe la capacidad de capturar y proteger valor tecnológico propio.
En paralelo, aunque asoman signos positivos en la presencia de soluciones digitales y en el desarrollo de empresas exportadoras o tecnológicas, la diversificación hacia software, hardware especializado o soluciones avanzadas todavía es incipiente.
BARRERAS ESTRUCTURALES QUE FRENAN EL DESPEGUE
Persisten obstáculos históricos: el acceso restringido a faenas mineras, la cultura conservadora del rubro y los largos ciclos de validación tecnológica ralentizan el desarrollo, pilotaje y escalamiento de nuevas soluciones. Además, solo un tercio de los proveedores ha logrado exportar en los últimos tres años, siendo los principales obstáculos el desconocimiento de mercados internacionales, las restricciones de financiamiento y los desafíos logísticos.
Es relevante mencionar que, para una parte significativa de las empresas, la internacionalización no es prioridad, ya que su foco sigue siendo el mercado nacional, lo que influye en el bajo uso de mecanismos de internacionalización y propiedad intelectual avanzada.
DIVERSIDAD INTERNA Y COLABORACIÓN: OPORTUNIDADES LATENTES
No todas las empresas proveedoras son iguales. Aquellas que exportan, tienen capital internacional o están orientadas a la tecnología muestran mayor capacidad de innovación y gestión de la propiedad intelectual, dejando en evidencia brechas estructurales al interior del propio sector.
Por otro lado, la colaboración con actores del conocimiento (como universidades y centros de investigación) es baja; la cooperación se concentra principalmente entre clientes y proveedores de equipos. Esta limitada vinculación reduce el potencial de escalar desarrollos tecnológicos y generar soluciones disruptivas.
CONCLUSIONES Y PISTAS PARA EL FUTURO
Entre las principales conclusiones del estudio realizado por Cochilco detstacan:
- Innovación activa, pero poco institucionalizada: El sector innova, pero sin estructuras formales, procesos o presupuestos claros.
- Alta dependencia del autofinanciamiento: La innovación se sostiene mayoritariamente con recursos propios; el uso de fondos externos es marginal.
- Baja adopción de mecanismos avanzados de propiedad intelectual: Predominan las marcas, mientras que patentes, licencias y vigilancia tecnológica son poco utilizadas.
- Barreras estructurales del sector minero: Dificultades de acceso, validación tecnológica extensa y una cultura conservadora dificultan la adopción de nuevas tecnologías.
- Internacionalización limitada: Solo un tercio de las empresas ha exportado, siendo los principales obstáculos el desconocimiento de mercados, financiamiento y logística.
- Concentración en servicios operacionales: La mayoría se dedica a servicios en terreno y venta de equipos; la oferta de soluciones tecnológicas avanzadas es baja.
- Baja participación en programas públicos de apoyo: Pocos proveedores han utilizado instrumentos públicos, concentrándose en CORFO.
- Desigualdades internas: Empresas exportadoras, tecnológicas o con capital internacional muestran mayores capacidades y sofisticación.
- Baja vinculación con universidades y centros de I+D: La colaboración con actores del conocimiento es aún incipiente.
PISTAS PARA UN SECTOR MÁS INNOVADOR Y COMPETITIVO
A pesar de las brechas, el sector proveedor minero chileno exhibe una alta autopercepción tecnológica y una base empresarial amplia, lo que abre oportunidades para impulsar políticas públicas, fortalecer capacidades internas y promover mayor sofisticación y competitividad.
El desafío es avanzar en colaboración público-privada, articulando esfuerzos entre el Estado, las empresas mineras, los proveedores y las instituciones de ciencia y tecnología. En este contexto, la Mesa Nacional de Desarrollo de Proveedoras surge como un actor clave para reunir a los distintos actores, generar acuerdos y promover iniciativas conjuntas que aceleren la innovación.
Potenciar espacios de pilotaje, mejorar el acceso a financiamiento y fortalecer la vinculación con universidades y centros de investigación son pasos necesarios para dinamizar el ecosistema y construir una minería más competitiva, innovadora y sostenible, alineada con los desafíos y transformaciones de la minería del futuro.
El documento se puede revisar en el sitio web de Cochilco: https://www.cochilco.cl/web/




