Mujeres en la minería: Un viaje desde la exclusión hasta el liderazgo global

• Por Silvia Riquelme Aravena, directora de www.guiaminera.cl //

Este domingo 15 de junio se celebra una fecha significativa: el Día Internacional de la Mujer en la Minería. Esta efeméride, impulsada por la organización internacional Women in Mining (IWIM), busca visibilizar el rol y las contribuciones de las mujeres en la industria minera. Más que una conmemoración, esta fecha es un recordatorio de los desafíos superados y de los que aún quedan por enfrentar.

Durante siglos, la minería en Chile fue un bastión exclusivamente masculino. Las mujeres en faenas eran vistas como portadoras de «mala suerte» y su presencia era considerada un riesgo para la estabilidad de los yacimientos. Se decía que «la mina se ponía celosa» y, junto con estas creencias, el artículo 15 del Código del Trabajo impedía su acceso a las minas subterráneas. Por años, el único lugar donde se permitía la presencia femenina era en oficinas administrativas, como asistentes o en tareas de aseo.

Pero el destino de las mujeres en la minería comenzó a cambiar en 1996, cuando la derogación del artículo 15 marcó el fin de una era de exclusión. Este hito permitió que las mujeres ingresaran a las minas subterráneas y comenzaran a abrirse camino en este sector dominado por hombres. Este cambio no solo reflejó un avance legislativo, sino también un cambio cultural que empezaba a cuestionar las barreras impuestas por las supersticiones y normas de género.

Antes de los cambios legales, algunas mujeres desafiaron lo establecido y se atrevieron a traspasar los límites. Tal fue el caso de la geóloga Alejandra Arévalo Troncoso, quien en 1993 marcó un precedente histórico al convertirse en la primera mujer en trabajar en la mina subterránea El Teniente, en Rancagua. Su osadía abrió puertas para muchas más, demostrando que el talento y la capacidad no tienen género.

Desde entonces, la presencia de mujeres en la minería chilena ha experimentado un crecimiento notable. En 2011, la participación femenina era apenas del 7,1%. Sin embargo, para 2024, este indicador alcanzó un impresionante 21,8%, superando la meta establecida en la Política Nacional Minera 2050 y consolidando a Chile como un líder global en inclusión femenina en este sector.

El crecimiento no solo es numérico: las mujeres han comenzado a ocupar roles fundamentales en la minería, desde operadoras de maquinaria pesada —como la primera mujer en operar un camión CAEX en 2011— hasta líderes en proyectos estratégicos y presencia activa en cargos gerenciales. Incluso, tenemos una ministra de Minería, y hemos tenido tres en la historia del país.

En términos de participación global, Chile se ubica en el segundo lugar, solo detrás de Australia (22%) y superando a países referentes como Canadá (18,4%) y Estados Unidos (13,6%).

El Día Internacional de la Mujer en la Minería

Con la mirada puesta en el futuro, 2025 trae consigo numerosas iniciativas para fortalecer la presencia femenina en la minería y alcanzar la paridad laboral. Programas como «Mujer, STEM y Minería» de Escondida | BHP, «Inspira» de Codelco y «Protagonistas Mineras» de FirstJob están diseñados para fomentar el aprendizaje, ofrecer prácticas profesionales y desarrollar competencias que permitan a las mujeres crecer y liderar en la industria.

Estos programas no solo benefician a las trabajadoras actuales, sino que también inspiran a las nuevas generaciones de mujeres interesadas en carreras en minería y disciplinas STEM (ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas), ampliando las oportunidades y reduciendo las brechas de género.

La historia de las mujeres en la minería chilena es una narrativa de perseverancia, resistencia y éxito. Desde la exclusión total hasta convertirse en referentes globales, las mujeres han demostrado que no existen límites cuando se combinan talento, esfuerzo y oportunidades.

Hoy, con un 21,8% de participación, Chile se consolida como un modelo de inclusión que no solo transforma la industria minera, sino también la sociedad en su conjunto. El camino hacia la paridad está lleno de desafíos, pero también de promesas. Con iniciativas sólidas y una visión de futuro inclusiva, las mujeres en la minería continúan construyendo un legado de igualdad y progreso para las generaciones venideras.

Desde esta tribuna va mi más cálido y respetuoso saludo a cada una de las mujeres mineras que, con valentía y gran responsabilidad, se atrevieron a explorar y horadar este camino que extrae la riqueza desde las profundidades de la tierra. Ustedes son pioneras y ejemplo de esfuerzo, resiliencia y compromiso, demostrando que no hay límites para quienes tienen el corazón dispuesto a conquistar nuevos horizontes. ¡Gracias por ser inspiración para las nuevas generaciones y por todo lo que aportan a este noble oficio, que enorgullece no solo a sus familias, sino a todo Chile!